top of page

¿QUIEN FUE JUDAS ISCARIOTE?

  • Writer: Pbrorodrigocuevas
    Pbrorodrigocuevas
  • Mar 30, 2021
  • 4 min read

Mateo 26, 14-25

En aquel tiempo, uno de los doce, llamado Judas Iscariote, fue a los sumos sacerdotes y les propuso: ¿Qué estáis dispuestos a darme si os lo entrego? Ellos se ajustaron con él en treinta monedas. Y desde entonces andaba buscando ocasión propicia para entregarlo.

El primer día de los ázimos se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron: ¿Dónde quieres que te preparemos la cena de Pascua? El contesto: Id a casa de Fulano y decidle: "El Maestro dice: mi momento está cerca; deseo celebrar la Pascua en tu casa con mis discípulos".

Los discípulos cumplieron las instrucciones de Jesús y prepararon la Pascua. Al atardecer se puso a la mesa con los doce. Mientras comían, dijo: Os aseguro que uno de vosotros me va a entregar. Ellos consternados se pusieron a preguntarle uno tras otro: ¿Soy yo acaso, Señor? El respondió: El que ha mojado en la misma fuente que yo, ése me va a entregar. El Hijo el Hombre se va como está escrito de él; pero ¡ay del que va a entregar al Hijo del Hombre!, más le valdría no haber nacido. Entonces preguntó Judas, el que lo iba a entregar: ¡Soy yo acaso, Maestro? El respondió: Así es. P.D.


¿Conocemos a Judas Iscariote? El nombre de Judas es conocido en la historia como sinónimo de traidor y ha causado tanto desprecio, como admiración, quizás por el temor a sufrir su mismo destino. A partir del descubrimiento de un manuscrito gnóstico titulado el evangelio de Judas, de alrededor del siglo II d.C., bajo circunstancias bastante oscuras, comenzaron a aventurarse hipótesis de que la Iglesia habría falsificado la figura de Judas, y su nombre fue nuevamente puesto en el tapete. El mencionado evangelio de Judas, por su parte, es tan difícil de traducir como de interpretar.


Comencemos por acercarnos a Judas, analizando lo que los evangelios sinópticos dicen sobre él. En ellos parece muy sugestivo que Judas sólo aparece al comienzo y en la última cena. No se lo menciona durante la vida pública y prédica de Jesús. Y desde la primera mención es designado traidor o entregador de Jesús.

Sabemos que fue elegido por el propio Jesús, para formar parte de su círculo de amigos más íntimos. Y podemos suponer que, aunque estos tres evangelios no lo mencionan, acompañó a Jesús durante su vida pública al igual que el resto de los apóstoles. Por lo tanto, escuchó sus enseñanzas, presenció sus milagros.


En la lista de los Doce, antes que Judas, es mencionado en los tres evangelios Simón, a veces denominado el cananeo o el zelota (Mt 10,4; Mc 3,18s; Lc 6,15s). Los Zelotas eran un grupo revolucionario que buscaba liberarse de los romanos, eran una especie de movimiento guerrillero. Simón, uno de los Doce, parece haber formado parte de este movimiento, y que era conocido con ese nombre. Él, junto a Judas Iscariote, son los dos personajes un tanto problemáticos, y aparecen citados al final de la lista.


Pero ¿Por qué traicionó Judas a Jesús? Marcos no da las razones por las que Judas decide entregar a su maestro. Mateo acentúa el tema del dinero. Lucas nos dirá que fue llevado por Satanás. En el momento de la traición, con un beso Judas identifica a Jesús para ser apresado. Luego del beso con el cual Judas lo entrega, Jesús lo confronta llamándolo Amigo, ¿Para qué has venido? y Lucas lo presenta preguntando: Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del Hombre? Al relatar el final de Judas, es castigado con una muerte horrorosa, pero en realidad no sabemos cómo murió Judas, lo más seguro es que se haya separado de los Doce, pues tuvieron que elegir a Matías.


El evangelio de Juan es el más sobrio a la hora de contar la historia. En el evangelio de Juan, después de la confesión de fe de Pedro que sigue a esta escena, dice Jesús: “¿No os he elegido yo a vosotros, los Doce? Y uno de vosotros es un diablo” (Jn. 6,66-71). Podemos ver que hasta aquí, Judas aparece no actuando, sino en boca de Jesús. Pero en Jn 12,5, Judas actúa, se escandaliza ante el derroche de un perfume por una mujer en los pies de Jesús, y se dice que era un ladrón. Aparece como persona interesada por el dinero y de poco valor moral.


En Jn 13,30: Judas se levanta y se va; “era de noche”, aclara el evangelista para dejar en claro que judas abandona el recinto donde estaba la luz y se va a la oscuridad. El Judas de Juan, al igual que el de Mateo, tiene interés por el dinero, pero aparece desde el principio como un diablo.


Cuando Jesús es arrestado, sus discípulos se asustan y se esconden. Pedro lo niega tres veces. Se marca una distancia entre ellos y Jesús. En ese papel activo de rechazo hacia Jesús, Judas acentúa la distancia.

Ante este hecho nos cuesta entender el misterio de este hombre, ¿Por qué traicionar a su amigo y maestro? Podemos suponer que fue la codicia, como deja entrever el evangelio de san Juan, o por sentirse defraudado al no ver cumplirse su expectativa, del mesianismo político que quizás esperaba. El mayor misterio de Judas es posiblemente, que viviendo al lado de Jesús, como su amigo y discípulo, no logró purificar su fe. Pero lo más importante es que el misterio de Judas es quizás nuestro también, porque es el misterio de mezquindad y debilidad humana de la cual todos podemos ser presa.


Jesús siempre está buscando salvarlo, y al reflexionar sobre Judas debemos recordar que siempre está buscando salvarnos a nosotros también. ¿Y cuántas veces hemos actuado como Judas? ¿Cuántas veces, lo hemos dejado solo, hemos antepuesto ambición y egoísmos al amor que Él nos ofrece? Y en nuestros hermanos, ¿acaso nunca lo hemos traicionado, negado, mirado hacia otro lado? Judas se equivocó, como tantos otros. Lo importante es saber volver a Jesús y, en lugar de sumergirnos en el remordimiento y la culpa sin fin, ser capaces de buscar su misericordia.

P. Rodri



 
 
 

Comments


Subscribe

Stay up to date

Home: GetSubscribers_Widget
Church Altar

CONTACT

Your details were sent successfully!

Home: Contact
bottom of page